Esfera rosa candy
Esta tonalidad viva y luminosa es fruto de un auténtico savoir-faire interno que asocia artesanía y alta tecnología. Los tonos creados para la gama Oyster Perpetual presentan en un principio forma de laca que ha de aplicarse con precisión y de forma regular con el fin de obtener una superficie uniforme. La operación se realiza en un entorno con atmósfera controlada para evitar cualquier mota de polvo o impureza. Una tras otra, seis capas de laca se depositan sobre el disco de latón que conforma la base de la esfera. A continuación se aplica un barniz antes del pulido, para conferirle al color todo su brillo y luminosidad. Posteriormente se tampografían las distintas inscripciones, mientras que los índices y la corona se remachan a mano. Resplandeciente e impecable, la esfera está lista entonces para su montaje sobre el movimiento durante el ensamblaje del reloj.